Por desgracia llegó el día…el último del campa. Hemos disfrutado del último día de surf y después hemos ido a uno de los pueblos más bonitos de España: Santillana del Mar. Hemos podido perdernos por sus empedradas calles y además hemos comprado regalitos a papis, mamis y monis (o no).
Ha sido una experiencia mágica. Hemos formado una gran familia y hemos disfrutado como nunca. Juegos, dinámicas, canciones, algún que otro tortazo en el surf, monitores geniales y sin parar de sonreír.
Gracias por tantos momentos divertidos, ha sido una decena para enmarcar.
¡Volveremos el año que viene!